Jefe de Universitarios de Schoenstatt Oeste,
Juventud Masculina de Schoenstatt
Una devoción que toca mi corazón
Desde hacía tiempo tuve la inquietud de compartir unos pensamientos que me inquietaban y que voy a plasmar en este artículo. Desde el 13 de mayo del presente año, surgió en mi una nueva devoción Mariana. Y hoy no veo que no voy a encontrar un mejor día para escribir estos sentimientos en el día del Inmaculado Corazón de Maria.
Muchos sabrán que este año la juventud está preparando todo el corazón para asistir a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ2023 en Lisboa) y de paso conocer la historia y lugares de peregrinación a los que asistiremos. Por esta tarea, me propuse conocer más acerca de la Virgen de Fátima, sin saber que iba a quedar impactado por esta devoción. Pero más especialmente por una de sus promesas “Al final mi Inmaculado Corazón triunfará”
La promesa: Mi Inmaculado Corazón Triunfará
Esta promesa fue revelada a Jacinta, Francisco y Lucia debido a que la Virgen pedía que fuera consagrado a su corazón la nación de Rusia. Donde de paso advertía de sus errores y de las guerras que esta ocasionaria en caso de no hacerlo... Años más tarde en 1981, el Papa San Juan Pablo II iba a sobrevivir de un atentado gracias a lo que él consideró como la intercesión mariana de Fátima, tomando más fuerza esa promesa de “Al final mi inmaculado corazón triunfará”.
¿Qué significa todo esto para nosotros?
Quiere decir que el Inmaculado Corazón de María actúa como esa promesa de esperanza en medio de las peores circunstancias humanas. Llega a ser ese refugio transformador al cual sus hijos pueden ir, así como testimonió el Papa. Esto me hace reflexionar mucho lo vinculada que está la advocación con nuestro propósito Schoenstattiano y de juventud. Nuestro ideal de universitarios es “Somos Ver Sacrum, reflejos de Cristo” y el propósito de este es ser esa luz de esperanza en medio de las circunstancias de penumbra y de un mundo desorientado que cada vez paga peor sus consecuencias de falta de amor.
Un sí a la Alianza de Amor
La Madre que congregó a los primeros seminaristas en Schoenstatt en esa primera Alianza de amor, llamó de igual manera a estos "nuevos congregantes" que son Jacinta, Francisco y Lucia, reunidos entorno a Ella les muestra su bondad a pesar de que ese pueblo los cuestionó y no les creyó. Me emociona el alma saber que el propósito de esos niños se va a lograr ahora en agosto, cuando millones de jóvenes atestigüemos con ellos a esa Madre que nos recibe con los brazos abiertos. Una oportunidad sin igual para consagrar la juventud del mundo al Inmaculado Corazón de María.
Un llamado final
"No dudar de consagrarse uno, su vida, su familia y su entorno al Inmaculado Corazón de María. Confiando siempre en su promesa de que no importa bajo qué circunstancia o penumbra se esté, su corazón siempre triunfará y por tanto es refugio para nosotros los pecadores.
Una nota sobre nuestro autor
Ian Cunningham Vargas es el jefe de los Universitarios de la Juventud de Schoenstatt, en la Diócesis de San José Oeste. Pertenece al Movimiento desde hace más de cuatro años y ha sido dirigente los Pioneros (12-18 años en la Juventud Masculina) y ahora además de liderar a estos jóvenes, se prepara académicamente estudiando en la UCR Administración de Empresas. Siempre con una sonrisa y energía sin igual estamos seguros que junto a sus compañeros y compañeras, nos representará magnánimamente en la JMJ 2023.
¡Que Dios los bendiga y la Mater los acompañe!
Comisión de Comunicaciones del Movimiento de Schoenstatt