Abrazadas por María
En una mañana de verano, asoleada y ventosa en los jardines de la Basílica de Nuestra Señora de Ángeles, sentadas en una manta, disfrutando una deliciosa merienda, entre risas, lectura, con el corazón lleno de ilusión, ahi se decidió la fecha de ese intercambio de corazones…
Su encuentro amoroso estaba agendado en ese espacio lleno de gracias, donde surge la esperanza, se enjugan las lágrimas y se vivencia el crecimiento a los pies del Santuario para toda la familia de Schoenstatt.
Ellas crecieron ahí en su amistad con Ella, con su Hijo y como grupo. Después de muchas reuniones, Misas compartidas, propósitos particulares trabajados, oraciones… muchas contribuciones al Capital de Gracias, llegó ese gran día: su Alianza de Amor con la Mater.
Llenas de paz, felices, elegantes, vestidas de blanco, con una rosa roja entre sus manos, con su mirada clavada en Ella, una a una caminó despacio hacia Su encuentro. En ese trayecto, se percibía como cada una entregaba todo, se daba ese intercambio, sin prisa, disfrutando la canción “María Mírame”.
En un rito muy emotivo, en un ambiente lleno de solemnidad, orden, alegría y sencillez, sellaron su Alianza de Amor las “Abrazadas por María”, agradecidas en sentirse y saberse hijas amadas, ABRAZADAS, cobijadas por Ella con su Hijo.