Ser Custodias vivas
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Ser portadoras de Cristo
Por Gloriana Gazel, rama de SeñorasCorpus Christi es la fiesta de la presencia de Cristo Eucaristía
...y celebramos dicha fiesta con la adoración en una Custodia… Este es el Ideal de la Rama de Señoras “ser Custodias vivas” centradas en la filial entrega de su corazón a Dios a través de la Mater y la disposición de ser portadoras de este tesoro a sus familias y a su entorno cotidiano.¿Qué es una Custodia?
Es un objeto creado con gran esmero. Es sagrada y digna de veneración porque encierra a Dios todopoderoso. Es transparente y posee un gran centro.
¿ Cual es su misión?
Está hecha para llenarse de Dios, para guardar lo más precioso. También Lo muestra, dirige la atención hacia ese gran Centro. Es un instrumento en manos de otro, es tomada, alzada e incluso sale a las calles llevando su riqueza a todos. Es un puente entre Dios y el hombre.
María es la primera Custodia Viva que trajo a Cristo al mundo. La llevó a la familia de sus parientes, tuvo una vida natural y sobrenatural.
Dos ramas en vinculación
Con estas palabras de Gloriana Gazel inició la adoración de la rama de Señoras en el Santuario familia de Esperanza en una hermosa noche en Santa Ana. Junto a la juventud de Schoenstatt, quienes normalmente se reúnen para hacer adoración cada jueves por la tarde, fue un momento de vinculación entre ramas que también llenó de alegría muchos corazones.
Dos encuentros, dos ritmos de vida
Bajo ese ideal, asemejarse a María siendo Custodias Vivas la rama organizó dos encuentros de adoración a nuestro señor Jesucristo. La tarea como mujeres cristianas es ser madres, esposas, hijas, hermanas, amigas con una vida natural que cuidar, desarrollarse con amor y esmero, pero también están llamadas a llevar a sus familias y a quienes Dios les confía en la vida diaria para guiarle hacia Dios mismo al desarrollo de la fe.
Los grupos de la rama que tienen encuentros luego de la jornada laboral, también abrieron el espacio de adoración en medio de sus obligaciones cotidianas
El que canta, ora dos veces
Ser Custodias Vivas implica irradiar a Cristo como María. Ella le dio su sí, lo tuvo en su vientre, lo sostuvo en sus brazos, le ayudo a crecer en la fe y lo acompañó en la Cruz. Para irradiarlo las señoras que por su situación de vida podían encontrarse con Él en horas de la mañana también contaron con la oportunidad de amarlo, llenarse de Él en la adoración al Santísimo, en la Eucaristía. Durante una hora santa guiada por Warren Jiménez, la música y los cantos movieron el corazón de las participantes. El encuentro culminó con el rezo de la oración de las Custodias vivas, que identifica a este grupo de señoras.
Rama de Señoras Costa Rica
